Si quieres limpiar tu cerradura como los profesionales y aprender a engrasarla en este artículo te presentamos algunos pasos para lograrlo. Nuestros expertos han seleccionado y analizado las mejores alternativas para limpiar y engrasar una cerradura correctamente. Sigue leyendo para conocer cómo debes proceder para conseguir limpiar y engrasar de forma eficiente la cerradura de tu puerta.
Consejos para limpiar y engrasar paso a paso una cerradura
Conforme va pasando el tiempo es normal que las cerraduras envejezcan por el desgaste y dejen de funcionar de forma adecuada. Tanto el desgaste diario como la falta de limpieza y engrasado pueden provocar el mal funcionamiento de una cerradura y que cuando vayas a utilizar tu llave esta no gire bien o no te permita abrir la puerta sin forzar la cerradura. Para prevenir este problema es fundamental realizarles un mantenimiento periódico aproximadamente cada seis meses. Se puede hacer rápidamente en tan sólo cinco minutos y garantizará una vida más larga para tus cerraduras.
De todas formas, si no has seguido estos consejos y de repente tus llaves han empezado a atascarse o a girar mal no te preocupes porque todavía estás a tiempo de aprender a limpiar una cerradura y engrasarla como los profesionales. En la mayoría de casos cuando las llaves se atascan es básicamente porque falta grasa en la cerradura, aunque en otros casos también puede pasar que su mecanismo se encuentre atascado o bien obstruido de forma interna por alguna sustancia o algún tipo de objeto que se haya ido acumulando en la cerradura con el paso del tiempo.
Primero que nada te recomendamos limpiar muy bien todas tus llaves y también el exterior de la cerradura. De esta forma vas a conseguir evitar que las partículas de suciedad y restos de polvo puedan dañar el mecanismo de ésta. Para realizar esta limpieza puedes usar un paño húmedo, pero no deberías usar disolventes porque pueden llegar a dañar tus llaves y el exterior de la cerradura. Después no te olvides de secarlo todo bien utilizando un paño en seco.
Lo siguiente que tienes que hacer para limpiar y realizar un óptimo mantenimiento de tu cerradura es engrasarla. Para este proceso los expertos recomiendan usar grafito en polvo. Si no sabes lo que es no te preocupes porque podrás adquirirlo en todas las ferreterías. Si no tienes tiempo o no quieres invertir parte de tu presupuesto en comprar este producto una alternativa económica es utilizar la punta de los lápices, ya que contienen grafito. Para ello tendrás que aplicarlo de forma repetida sobre tu llave. Cuando tu llave ya tenga suficiente grafito tendrás que introducir la llave en la cerradura y girarla varias veces hasta que creas que la grasa se ha ido repartiendo por toda la cerradura y notes que la llave gira mejor.
Por otro lado, si no tienes ni grafito ni lápices puedes engrasar la cerradura con vaselina o con grasa para cerrojos, como nos explican profesionales cerrajeros, expertos que cuenta con multitud de experiencia desatascando cerraduras y realizando el mantenimiento de todo tipo de puertas y cerrojos.
Ahora bien, estos expertos advierten también de que ésta es probablemente la opción más complicada porque para usarla tendrás que desmontar la cerradura, ya que esta grasa debe aplicarse de forma directa en la cerradura. Por otro lado, los expertos tampoco recomiendan utilizar grasa o aceite en lugares en los que se vaya a quedar pegado el polvo del ambiente porque cuando pase el tiempo esta sustancia se incrustará dentro de tu cerradura e impedirá que pueda funcionar de manera fluida.
Es importante limpiar bien todos los mecanismos de la cerradura y no olvidarnos de aplicar también el grafito en polvo u la grasa para cerrojos en nuestra llave.
Además también es importante limpiar la parte externa de la cerradura usando un paño con algo de agua. No uses objetos afilados ni disolventes porque podrías destruir o dañar de alguna manera la tapa que protege la cerradura. Cuando vayas a sacar una copia de la llave tendrías que revisar siempre antes de usarla si se encuentra bien cepillada porque si quedan partículas de latón en ella pueden arañar el interior de la cerradura e incluso llegar a estropearla.
En conclusión, teniendo en cuenta estos consejos y realizándolos de forma regular cada seis meses conseguirás prevenir la fricción entre los diferentes mecanismos de tu cerradura logrando que tu llave pueda girar de forma más suave y alargando de esta manera la vida útil de tu cerradura de forma profesional.
